El gusano del metro

Hace décadas que se oyen rumores sobre el gusano de metro. Los taquilleros, los maquinistas y los operarios lo comentan bajito, en pequeños corrillos.

Se trata de un gusano gigante, de unos ochenta metros de largo y dos y pico de diámetro, que campa a sus anchas por algunas líneas de la red de metro.

Con el paso de los años, el gusano se ha adaptado y mimetizado. Se atreve a recorrer las vías y pasa por delante de los andenes repletos de gente, que lo confunden con un convoy normal.

A veces, a primera hora de la mañana, el gusano se detiene en algún andén y abre esas extrañas branquias que tiene en su lateral, más propias de un pez que de un gusano. Entonces, cientos de viajeros somnolientos entran en el gusano, confundiendo las branquias con puertas de un vagón.

El gusano regresa entonces por las vías a su guarida desconocida donde, durante horas, consume la energía vital de los anestesiados viajeros que alberga dentro de su aparato digestivo.

A última hora de la tarde, el gusano vuelve a alguna estación, abre sus branquias, y los viajeros salen del gusano consumidos, hastiados y aletargados, inconscientes de lo absurdo que resulta haber pasado doce horas dentro de un gusano gigante.

Entonces, esos viajeros se dispersan por los pasillos de la estación y se mezclan con otros ciudadanos que regresan a esa hora de sus lugares de trabajo, también consumidos, hastiados y aletargados, inconscientes de lo absurdas que han sido sus jornadas.

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29 respuestas a El gusano del metro

  1. Yohana dijo:

    Jo, pues vamos «aviaos». Entre los parasitos chupadores de energía y los parasitos del patrimonio, no nos van a dejar nada. ¿porque no habré nacido comensalista?

    • Isma dijo:

      ¡No a la reforma laboral! ¡También no a la reforma gusanil! ¡Dejad de chuparnos la energía vital! Vermiformes go home! 🙂

      ¿Será ese gusano un mirokiano que llevaba miles de años aletargado? 😉

  2. Mdl dijo:

    Me encanta y me gustaría utilizarlo en mis clases ¿Puedo? o ¿será denunciada por el autor? jajaja

  3. Yohana dijo:

    Dicen que no hay mayor enemigo de la libertad que un esclavo féliz

  4. javirl dijo:

    Me encanta ese punto, más cerca del surrealismo que de la ciencia-ficción, me recuerda a Cortázar. Un cuento formidable….

    • Isma dijo:

      En los microrrelatos suelo usar un lenguaje mucho más metafórico que en los demás cuentos. Supongo que la metáfora es muy efectiva si quieres trasmitir algo complejo con pocas palabras: desatan la imaginación y trasmiten mucho con lo que no dicen. Las 256 palabras del microrrelato se convierten en muchas más cuando el lector se pone a imaginar. 🙂 En las historias largas soy mucho más directo. Supongo que me costaría mucho más llenar varias páginas con alegorías y metáforas. Es algo en lo que debo aprender y esforzarme más…

  5. Yohana dijo:

    He de confesar que después de leerme Rayuela, decidí no leerme más libros de este autor.
    (Espero no me pegueis).Me gusta que las historias tengan un punto surrealista, pero al leerte un libro entero (de «unmontondehojas», que ya no me acuerdo cuantas) surrrealista de la primera palabra a la última, y que además se mofa de Perez-Galdos, no puedes acabar sino con cierta sensación de mareo, y cierta frustración también, por que no estas del todo segura de como ha acabado la historia.
    Pero quizá sea un poco injusto. A lo mejor tiene otras obras interesantes, y yo no le doy la oportunidad. Pero es que hay tantos libros prometedores..

  6. Yohana dijo:

    Algunas cosas sí recuerdan a np-completo, pero me sigue sin convencer tanto surrealismo.
    Yo necesito saber: ¿que es una fama?¿y un cronopio?.¡Que me lo expliquen primero!
    ¿Y cuál es la historia?. Para mí, se trata de escribir solo por escribir, no tengo la sensación de que se esfuerce por transmitir nada.

    Y ya que estamos, ¿que lío traeís con lo de las 256 palabras?

    • Isma dijo:

      Normalmente suelo ser más «racional» que Cortázar… aunque esporádicamente me suelto y me parezco más a él.

      Lo de las 256 palabras no es más que un simple guiño informático (un byte puede representar 256 números posibles), aunque ese guiño no es muy relevante si la propia historia no va sobre informática, claro. Por ejemplo, podría haber escrito el cuento «Está escrito en pi» con 314 palabras, o con 3.141, o con 31.415. Es como si alguien escribiera una novela sobre física con c palabras (299.792), o una novela sobre química con un mol de palabras (6 por 10 elevado a 23 palabras). Espero que ésta última fuera buena porque, si no, vaya pedazo de muro sería (digo «muro» porque la palabra «ladrillo» se quedaría muy corta). Un cuento sobre filología española podría contar sólo con 27 palabras… Aunque todo depende de si ese año ‘Ch’ y ‘Ll’ son letras o no, que se aclaren. ¿Cuántas palabras podría tener un cuento sobre astrofísica? ¿8 ó 9? ¿Plutón es planeta? Mejor usar la constante de gravitación universal, que ésta no cambia…

      Curiosamente, esta entrada tiene exactamente 200 palabras y números. También tiene exactamente 1000 caracteres, sin contar blancos. Incluyendo estas frases.

      • javirl dijo:

        Naaaa, el nivel de retorcimiento semántico y simbólico se puede llevar más allá. Tienes que escribir cuentos que, cuando sean interpretados como archivos JPG, muestren unas preciosas ilustraciones de los mismos… 😉 😉 😉 Y el summum sería escribir una historia que, cuando la interpretas como un MP3, te lee un final alternativo… 😀

  7. Yohana dijo:

    Que rebuscado eres…¿y que parte quitas (o pones) para que te salgan exactamente el número de avogadro de palabras?. En una novela muy larga, podría ser posible.., pero perderias mucho tiempo en ajustarlo. ¿tan detallista eres?
    A lo mejor Cortázar tiene obras que me convencerían más; pero no significa que las que no lo hacen, no sean buenas para el resto. Para gustos, están los colores.

    • Isma dijo:

      Lo del número de Avogadro de palabras lo veo realmente jodido, lo decía de coña. 😉 Una novela normal puede tener unas cien mil palabras, pero el número de Avogadro es aproximadamente seiscientos mil trillones… Vamos, que hay que coger seis trillones de novelas para formar una «meganovela» con ese número de palabras. Con seguridad, muchas más que todas las novelas que se han escrito nunca… Por ejemplo, en la biblioteca más grande del mundo hay unos ciento treinta millones… 🙂

  8. Yohana dijo:

    hombre, si nisiquiera lo intentas….

  9. Isma dijo:

    🙂 Me faltarán vidas, pero ya estoy en ello.

  10. Yohana dijo:

    Pobre..
    Sólo era una broma, tampoco es que tengas que reponer la bilbioteca de Alejandría.
    Además, hay muchas otras pequeñas actividades placenteras en la vida, a parte de escribir relatos, que seguramente convendría que prácticaras además.

    • Isma dijo:

      Efectivamente, hay muchas más actividades placenteras, y también las practico. De hecho, mi mujer me limita el número de horas semanales que puedo dedicar a escribir nuevas historias y a mantener este mismo blog, igual que a los niños de diez años a veces se les guarda la playstation bajo llave. Pero me parece bien. Pasa como con todo: los vicios con moderación son mucho más placenteros que sin moderación. 🙂

  11. Isma dijo:

    Javirl, jejeje, muy bueno (y muy retorcido) lo del JPG y el MP3. 🙂

    Otra vuelta de tuerca más: propongo escribir un libro que trate sobre la Eternidad donde, en el último capítulo, se den al lector una serie de instrucciones tales que, si el lector las sigue al pie de la letra, logrará escribir el verdadero capítulo final del libro. Pero, oh sorpresa, al seguir las instrucciones, el lector acabará escribiendo otra vez las mismas instrucciones exactamente, las cuales, si las volviera a obedecer, le darían lugar a las mismas instrucciones otra vez, y así para siempre como una bonita metáfora sobre la Eternidad.

    Puede parecer que hacer tal cosa no es posible. Por ejemplo, intentémoslo escribiendo unas instrucciones que consistan en pedir al lector que escriba directamente las propias instrucciones. Quedarían estas instrucciones: «Estimado y amado lector, deberá escribir lo siguiente: «Estimado y amado lector, deberá escribir lo siguiente: «Estimado y amado lector, deberá escribir lo siguiente: ……….. Y no terminaría nunca. Por tanto así no vale, pues las propias instrucciones tendrían longitud infinita y el propio libro sería infinito.

    Pero se puede hacer con longitud finita, creedme. La solución es demasiado freaky para que la explique aquí, incluso para este blog. Pero se puede por una cosa llamada «Teorema del punto fijo». No sólo sabemos que puede hacerse, sino que además sabemos cómo hallar paso a paso dichas instrucciones.

  12. Yohana dijo:

    No he entendido bien cuál es la idea de la versión MP3…o sea, que la primera vez que lo oyes, la historia es de una manera, pero la segunda, ¿cambia el final?.
    Pues ya puestos, podrías incorporar la opción de «crea tu propia aventura» (ya ves, un poco tipo Cortázar): «si quiere el héroe muera, pulse 1», «si quiere que el héroe mate al dragón, pulse 2», «si quiere que el héroe deje a la princesa por el escudero, pulse 3»..etc

    Con respecto al libro «eternidad», un último capítulo en el que todas las frases sean «Estimado y amado lector, deberá escribir lo siguiente:», tiene que ser un poco aburrido de leer. Pero estoy segura de que alguno lo haría (a ver que descubre), y posiblemente en un futuro dé lugar a una tesis doctoral: «Eternidad y sus implicaciones al infinito». Y después la segunda tesis «Eternidad y aplicaciones del Teorema del punto fijo» (espero no parecer muy mala, no lo soy)
    Supongo que el «Teorema del punto fijo» consiste en una serie de ecuaciones matemáticas enlazadas, que se pueden aplicar como modelo, y que me llevaría años entender bien (si lo consiguiera). No tiene por que ser friki (yo uso españolismos), solo complicado de entender. Pero me hace gracia como lo teneis todo pensado, ¡que utiliceis un teorema para escribir un libro! (perdón, el final de un libro). je, je, cuando lo tengais, ya me lo decís.

    Por cierto, que me parece fenomenal que tomes en consideración las sugerencias de Laura. Espero que lo práctiques a menudo. Pero sea como fuere, espero no tener demasiadas contribuciones entrópico positivas en la estructuración de tus obligaciones. No me gustaría tampoco.

    • Isma dijo:

      Sobre el MP3: Cualquier fichero de ordenador es un montón de caracteres, ¿no? Si abres un fichero MP3 con un editor de texto (e.g. el bloc de notas), verás un montón de símbolos extraños puestos aparentemente al azar (solo tienen sentido para el reproductor de MP3). Pues bien, imagina que diera la casualidad de que esos símbolos no fueran una secuencia caótica, sino un texto en castellano que cuenta una bonita historia. Pero luego, al abrir el fichero mismo fichero con un reproducir de MP3 (no con el bloc de notas), una voz atercopelada te cuenta, hablando, cómo termina esa misma historia. Es decir, exactamente el mismo fichero, «leído» de dos formas diferentes, te contaría las dos partes de una misma historia. 🙂

      Lo del que el caballero abandone a la princesa por el escudero podría ser la base para una nueva versión del Quijote. Dulcinea podría vengarse robando a Rocinante. Si además Dulcinea fuera drogadicta (al fin y al cabo, roba «el caballo»), y también fuera prostituta y monja, entonces Almodóvar nos compraría los derechos con total seguridad. 😉 ¡Incluso sucedería en La Mancha!

      Sobre el punto fijo, lo de «Estimado y amado lector, deberá escribir lo siguiente: » repetido infinitamente es la forma incorrecta de hacerlo, pues así las instrucciones serían infinitas. Pero, aplicando el teorema, saldría algo del estilo de: «[…] coge la última letra que has escrito, eleva el i-ésimo primo a la posición de esa letra en el abecedario, multiplícalo por lo anterior, […]». Quedaría algo raro de narices y larguillo, pero no infinito.

      Tengo algunas historias con un grado similar de frikismo, pero esas NO las colgaré aquí. Quiero seguir teniendo algún lector que no sea super friki. ;-P

      Sobre Laura: no te preocupes, cumplo los límites. Y por ti no te preocupes: la entropía se abrirá camino hagas lo que hagas. No se puede luchar contra el segundo principio. 🙂

  13. Yohana dijo:

    Vaya!. Pues ya te imagino frente al ordenador, creando un programa que permita leer el archivo MP3 en las dos versiones. Fijate que me parece una excelente idea.(lo digo en serio).
    Puede ser la solución final para aquellas personas que sucumben a la tentación de leer el final de libro antes de tiempo.
    Aunque sigo pensando que deberías ofrecer varias versiones del final.
    Con respecto a los guiones de Almodovar, pues sí es una buena idea lo de Rocinante. Lo único que hay que hacer para obtener un buen guión Almovariano es asociar conceptos antágonicos y algo desvergonzados. Ejemplo: cristiano-homosexual, monja-prostituta, sátiro-vegetal, sádico-complaciente) y llamar a Penelope Cruz.
    Lo que no entiendo bien es donde encaja Rocinante.

    Con respecto al Frikismo, no debería preocuparte tampoco. Los que somos legos, en general, nos perdemos en muchos significados (que pena), así que podrías escribir un relato relativo a la significación estadistica de las correlaciones lineales, que a mí me parecería tan lógico y comprensible como los discursos politicos.Pero deberias colgarlos,porque aunque no todos los entendamos completamente, si hay alguien que sí lo hace, merecería la pena. Y quizá te parezca que serían una minoria, eso también lo pienso yo de los mitines politicos, y siempre están llenos de gente.

    Lo del teorema del punto fijo, le echare un vistazo rápido en la wikipedia, a ver si consigo captar alguna idea

    • Isma dijo:

      Oye, pues es buena idea eso de hacer un cuento de elige tu propia aventura. Se me acaba de ocurrir una vuelta de tuerca divertida pero comprensible a ese concepto. La escribiré en cuanto pueda.

      Sobre el Quijote alternativo: mejor no nos preguntemos qué papel podría tener Rocinante en una película de Almodóvar sobre ello. Como bien dices, sus asociaciones son del tipo sátiro-vegetal, sádico-complaciente… cura-niño (como en «La mala educación»)… así que imagina (o mejor no) protector_de_los_animales-Rocinante… 😦

      Quizás me anime a colgar algún cuento extraño en ésta o en la siguiente tanda. No quiero decir extraño en el sentido de que haga falta conocer algún concepto científico especialmente extraño para disfrutarlo (esos prefiero guardarlos de momento), sino en algún otro sentido.

  14. Yohana dijo:

    A ver si lo entiendo: ¿quieres crear unas instrucciones que obliguen al lector/escritor a seguir una secuencia «infinita» ,que viene determinada por una función que luego «converge» esa «secuencia» a un determinado final?…..

    • Isma dijo:

      Ese viene a ser el concepto general de punto fijo. 🙂 Pero hay tropeciendos teoremas del punto fijo. Para colmo, al que me refiero yo aparece normalmente llamado «segundo teorema de recursión» (aunque yo suelo decir simplemente «del punto fijo» porque sirve para hallar puntos fijos).

      Sin que sirva de precedente, intentaré explicarlo «fácilmente»… Ufff… A ver… Una «secuencia de instrucciones» es, en realidad, un programa. Cada programa posible tiene un número, y cada número un programa. Así que, si manipulas números, manipulas programas. Pero, si al programa 7 le sumo 1, me sale el programa 8 que nada tiene que ver con el 7. Si al programa 7 lo multiplico por 2, me sale el programa 14, que tampoco tiene nada que ver con el 7. Y lo mismo si elevo al cuadrado, hago el logaritmo, la arcotangente, o cualquier otra cosa retorcida que se nos ocurra.

      Pues bien, el teorema dice que, para CUALQUIER cosa retorcida que se nos ocurra hacerle a los números (sumarle 1, multiplicarlo por 2, sumarle tres si es cuadrado perfecto y cero si no, saber cuantos primos hay menores que él… vamos, lo que quieras), resulta que hay un número tal que, el programa con ese número y el programa tras haber aplicado esa cosa retorcida se comportan exactamente igual. Por ejemplo, tomemos «elevar al cuadrado». Pues existe un programa, pongamos el 127, tal que el programa 127 y el programa ‘127 al cuadrado’ hacen lo mismo. Tomemos ahora «sumar siete». Pues existe un programa, pongamos el 281, tal que el programa 281 y el programa 281+7=288 hacen lo mismo. Y así con cualquier otra cosa.

      Lo de que existe un programa (secuencia de instrucciones) tal que si lo sigues al pie de la letra acabas escribiendo otra vez el mismo programa (como propongo para un último capítulo de un libro) es una conclusión de lo anterior si le damos una vuelta de tuerca más: hacemos que «la cosa retorcida» consista en obtener, a partir de un número, un programa que siempra escriba ese número (es extraño, pero puede hacerse). Aplicando el teorema, acabamos descubriendo que podemos hacer que ese número sea… el del propio programa que lo escribe.

      Así que podemos obtener un programa que se genera a sí mismo.

      Puedes verlo así, que mola más: Si fuera un robot en vez de un programa, sería un robot capaz de construir una copia de sí mismo. Vamos, un robot que podría reproducirse. 🙂

      Ahora puedes usar esta curiosidad para vacilarle a casi cualquier informático: el 95% de los ingenieros informáticos no sabe nada de esto. Y la mayoría de los doctores en informática tampoco. 😉 Y en las próximas generaciones ya no lo sabrá ninguno, pues lo han quitado de la mayoría de los temarios.

  15. Yohana dijo:

    Esto es dificil.
    Lo que creo haber entendido es que existe un programa X , secuencia de instrucciones, que al aplicar un determinado tratamiento Y, y un determinado tratamiento Z, tienen ambos la peculiaridad de dar el mismo resultado.
    Pero lo que no he entendido,(creo que esa parte no la he captado) es donde incluyes el factor humano. Si solo consiste en darle a un botón para que se ejecute un programa, y luego a otro, hasta que llegue al resultado buscado ¿donde esta la gracia?

    • Isma dijo:

      Bueno, lo de X, Y y Z significaría que la función es constante, que es otra cosa… Me sería difícil explicar la gracia «general» del teorema sin entrar en follones técnicos. Quédate con el ejemplo que digo antes: permite que una estructura matemática (en este caso un programa) se replique a sí misma, es decir, que se reproduzca… lo que podría ser la base de la vida artificial.

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